miércoles, 1 de agosto de 2007

TEN FE



Es hora de ponerse las sandalias rojas de la fe. Entrechocarlas a través del tiempo y permitirles acompañarlos hacia portales de creencias que son mucho más grandiosas que cualquier creencia que hayan sostenido en el pasado. No pueden preocuparse y tener fe al mismo tiempo –ellas no pueden ocupar el mismo espacio, el mismo tiempo, la misma frecuencia. La energía de volar a través del aire con toda facilidad representa lo que se nos pide que hagamos. Se nos pide que DEJEMOS IR aquello a lo que nos hemos estado aferrando con tanta firmeza y nos permitamos una caída libre de una barra de luz a otra. El factor de la fe tiene que ser total. No se acepta nada menos. Cuando no vean una solución a lo que le acontece a su corazón, dejen que el Universo intervenga. Hagan lo que puedan y confíen en Dios, y el Universo hará lo que ustedes no pueden hacer. Se les pide que se mantengan en paz en medio de la batalla, que se afirmen con la certeza divina de que saldrán indemnes.Creer tan profunda y firmemente no es para los débiles de corazón, los débiles de luz o los débiles de propósito. Permanezcan firmes en lo que mora en su corazón. En medio de todo el Infierno desatado, conviértanse en una bendición viviente. Utilicen su luz y su corazón para bendecir al otro. Bendigan todo lo que se cruce en su camino, conviértanse en la curación y en lo sagrado, en su vida, en su apariencia y en su intención.Busquen formas de ser una bendición. Nunca pueden abandonar a Dios. Den lo que den, en bendición, en fe, en paz, para ustedes mismos o para otros, les será retribuido en denominaciones de culminación que sobrepasan cualquier expectativa que hayan o no hayan tenido. Dejen que el deseo de su corazón los conduzca a un lugar que los ayudará a evitar todo lo que llegue para burlar y circuncidar su alma.

(GILLIAN MACBETH-LOUTHAN)

1 comentario:

rosy_medel dijo...

pase por tu blog y me parecio muy interesante

saludos