lunes, 30 de julio de 2007

Eres lo que piensas



En un día promedio de 23 hs hay 186.500 segundos. La velocidad del pensamiento es ciertamente más rápida que un segundo. De modo que en un día promedio tienen aproximadamente 186.500 pensamientos a la velocidad de la luz. Si les diesen un penique por cada pensamiento en un día promedio, reunirían 865 dólares. Multipliquen eso por siete días y reunirían, por penique, por pensamiento, 6.055 dólares por semana. Multipliquen eso por mes y habrán reunido 24.220 dólares. Ahora expándanlo y multiplíquenlo por doce. En un año, sólo a un penique por pensamiento, habrán obtenido $ 290.400 únicamente por creer que recibirán un penique por pensamiento.

Siguiendo esta línea de pensamiento, les pido que gasten sus pensamientos con sabiduría. ¿290.400 dólares les alcanzan para vivir durante un año? Cada pensamiento se transforma en lo que ustedes creen – es una frecuencia pulsante, viviente, que obedece a su percepción de lo que debería ser. Mantengan este nuevo pensamiento que acaba de generarse y recíbanlo en la plenitud del tiempo. Recíbanlo en un lugar de merecimiento que sobrepase cualquier otro pensamiento limitado de conciencia de pobreza. Cada día tienen la posibilidad de crear positiva o negativamente. Cada pensamiento va hacia el Sur o hacia el Norte de su pensar hacia la abundancia, hacia la carencia, hacia tener lo suficiente o no tener lo suficiente y así es como se crea su día. Permítanse recibir las bendiciones financieras las veinticuatro horas del día los siete días de la semana, permítanse recibir milagros monetarios inesperados todos los días. Permítanse gastar la abundancia del Universo con placer y con sabiduría porque ésa es su herencia divina y su destino.
Cuando se quejan, envenenan su futuro. Cuando andan por ahí gruñendo y quejándose, están atrayendo más cantidad de ese mismo veneno hacia ustedes. Hagan todas las cosas sin refunfuñar, sin criticar ni quejarse. Ven lo bueno en toda situación y sean agradecidos. Encuentren a diario alguna razón para estar agradecidos, sin importar cuán nimia sea. Esto ayudará a diluir cualquier clase de queja tóxica que cree veneno en su cuerpo y en su vida. Siempre hay algo de qué quejarse, pero necesitan mirar detenidamente para encontrar por qué estar agradecidos. Vean lo bueno que los rodea, sean el que cambia el resultado. Dejen que Dios, el Universo, luchen por sus injusticias. Estén en un punto de agradecimiento justo donde están. Den las gracias por lo que está bien en su vida en lugar de quejarse por lo que está mal en ella. Ya que Dios está realmente dirigiendo nuestros pasos con su luz ¿por qué tratamos de figurarnos qué está ocurriendo a cada instante? Cuando se quejan constantemente de algo, las energías, el cuántico, la vitalidad, Dios, dicen: Está bien, les daré eso. Hagan todo sin protestar y verán que la magia y los milagros surgen en su vida a diario. Cuando estén preocupados, encuentren inmediatamente un punto de gratitud. Dejen que esos pensamientos los lleven a una vibración más elevada que los ayude a dejar atrás cualquier situación negativa.
(extracto de mensaje de los Pleyadianos)

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